Cheesecake de calabaza sin base

Hoy traigo una nueva receta de cheesecake, esta vez con el toque del puré de calabaza y sin base, para disminuir el aporte de hidratos.

Queda muy cremosa, excelente para poner el broche de oro a una cena festiva. La he decorado con nata montada y le he dado ese toque "crunchy" con unas nueces pecanas que he caramelizado con erythritol y monk fruit.

Es bien fácil de preparar, no tiene mucha complicación, ya verás. Ten en cuenta que debes prepararla con tiempo, mejor si es de un día para otro, o mínimo 6 horas antes de servir.

Mientras tenemos nuestra Cheesecake de calabaza en el horno, podemos ir adelantando la preparación de las nueces caramelizadas u otros platos para aprovechar el tiempo.

Y si quieres hacerla con base, te recomiendo la que usé para este pumpkin pie pero añadiendo media taza de nueces, le dará un toque especial.

Vamos con la receta!.

Cheesecake de calabaza sin base

Ingredientes para un molde desmontable de 6 pulgadas

250 gr de queso crema tipo Philadelphia
100 ml de nata para montar
100 gr de crema agria o yogur
200 gr de puré de calabaza 100%
25 gr de erythritol (edulcorante)
1 cdta de esencia de vainilla
2 huevos
1 cda de maizena u otro almidón
1 cdta de canela en polvo o especias para pumpkin pie

Para decorar

Nata montada
Canela en polvo
Nueces pecanas caramelizadas con edulcorante

Preparación

Es tan sencillo como mezclar todos los ingredientes con el batidor manual o eléctrico.

Procura tener todos los ingredientes a temperatura ambiente. Será más sencillo conseguir una mezcla homogénea, sobretodo si decides mezclarlos a mano.

Precalentamos el horno a 350ºf/180ºc y forramos el molde con papel de horno. Yo he puesto papel de horno tanto en la base como en los laterales, así evitamos tener problemas para desmoldar nuestra cheesecake de calabaza.

Vertemos la mezcla en el molde, lo colocamos sobre una hoja de papel aluminio, de forma que el molde nos quede envuelto. Es importante, pues vamos a cocer nuestra cheesecake al baño maría y no queremos que le entre agua al molde.

Acomodamos el molde en la bandeja del horno y añadimos agua caliente.

Horneamos 30 minutos a 350ºf/180ºc, luego bajamos a 300ºf/150ºc y horneamos unos 20 minutos más.

Pasado este tiempo chequea si está listo. Abre el horno y sacude un poco la bandeja. Debe notarse cuajado pero que tiemble un poco, parecido a un flan.

En ese momento apagamos el horno y dejamos que enfríe poco a poco dentro del mismo durante 1 hora.

Mientras tanto podemos ir preparando las nueces pecanas caramelizadas. Compartí la preparación en un vídeo para igtv que te voy a dejar por aquí.

Pasada 1 hora retiramos del horno y dejamos templar antes de llevar a la nevera.

Debe refrigerarse durante al menos 6 horas antes de desmoldar y servir.

Lo podemos decorar con un poco de nata montada, nueces pecanas caramelizadas y canela en polvo.

Es un postre excelente para aquellos que llevamos una alimentación baja en hidratos, un excelente broche de oro a cualquier cena de celebración.