8 errores que cometemos al practicar ayuno intermitente

El ayuno intermitente es una herramienta maravillosa dentro una vida saludable. Aliada en la pérdida de grasa y regeneración celular, ayunar se ha convertido en tendencia. Pero no todo lo que se ve en la redes es lo correcto. Así que aquí te voy a compartir 8 errores que puedes estar cometiendo al practicar ayuno intermitente.

1. No beber suficiente agua

Cuando estamos en la fase de ayuno, no estamos ingiriendo el agua que naturalmente obtendríamos a través de los alimentos. Así que debemos recordar beber agua, no esperar a tener sed.

Más aún cuando bebemos mucho café, pues este contribuye a la deshidratación.

2. Comenzar con demasiada intensidad, muy pronto

Es mejor comenzar con ayunos de 12 horas, quizás no todos los días y, poco a poco, ir aumentando la ventana de ayuno.

Sobretodo cuando venimos de una alimentación alta en carbohidratos, en la que comemos cada 2 o 3 horas, es preferible ir paso a paso. De lo contrario, se te hará muy cuesta arriba y no te vas a sentir capaz de mantener el hábito.

3. No incluir electrolitos

Sal, si, necesitamos sal siempre y especialmente cuando estamos ayunando. No, no es perjudicial, no, no sube la tensión.

No le temas a la sal. Agrega un pizca de sal a un vaso de agua o póntela directamente en la lengua.

4. No comer lo suficiente durante tu ventana de alimentación.

Ayunar durante un determinado período de tiempo, sean 12, 14, 16, 18 o 24 horas, no significa que vas a comer menos.

Come hasta estar saciado, incluye alimentos densos nutricionalmente hablando. Esto ayudará a evitar antojos durante la ventana de ayuno y, por supuesto, te será mucho más fácil. Tu hormona del hambre (grelina) estará apagada.

5. Combinar ayuno intermitente + dieta alta en carbohidratos

Al consumir altas cantidades de carbohidratos, estimulamos la producción de insulina y, por tanto, la posibilidad de antojos y sensación de hambre.

Así que procura incluir más proteínas y grasas para evitar los picos de glucosa y mantener los antojos a raya.

6. Rigidez con tu ventana de ayuno

La vida pasa.

El ayuno debe adaptarse a tu vida, no al revés. Permítete mover tu ventana de ayuno según tus planes de fin de semana, por ejemplo, cambiar los tiempos de ayuno y alimentación por un día no va a afectar lo que has conseguido durante toda la semana.

Lo mejor del camino hacia una vida saludable, es disfrutar del mismo.

7. No descansar bien

Necesitamos reponernos del día anterior. Si no dormimos al menos 7 horas, nuestro cortisol (hormona del estrés) aumenta y, por tanto, la grelina (hormona del hambre). El resultado va a ser antojos, sensación de hambre y mayor dificultad para cumplir con el ayuno.

Procura irte a la cama hacia las 10pm y dormir entre 7-8 horas. ¡Notarás la diferencia!.